Hola a todos y bienvenidos a la Semana de Commander.

Como  se acerca Travesía hacía Nyx, hemos pensado que sería divertido hablar un poco sobre uno de los formatos casual más populares, ¡Commander!

Una de las características principales de Commander es, por supuesto, los comandantes. Cuando construyes un mazo de Commander debes elegir una criatura legendaria para que sea el “comandante” o “general” de tu mazo. Después eliges 99 cartas adicionales (incluidas tierras) para que formen el resto del mazo. Cada una de estas cartas debe de formar parte de la identidad de color de tu comandante, la cual está formada por los colores de los símbolos de maná en el coste de la criatura, así como los que aparezcan en el cuadro de texto o en el indicador de color. Por ejemplo, la identidad de color de Memnarch es azul. Las cartas incoloras también sirven. Commander es un formato de singleton, es decir, no puedes tener más de una copia de cada carta en tu mazo (excepto tierras básicas), lo que hace que tengas que tomar más decisiones a la hora de construir tu baraja.

Cuando empiezas una partida de Commander, las 99 cartas de tu mazo se convierten en tu biblioteca. A continuación colocas el comandante en una zona diferente, conocida como la zona de comandante. Esta zona es similar al exilio, salvo que es mucho más difícil sacar las cartas de la zona de comandante que del exilio. Solo los efectos que se refieran específicamente a cartas en la zona de comandante pueden afectar a estas.

Sin embargo las propias reglas de Commander te permiten lanzar tu comandante desde la
zona de comandante en cualquier momento en que pudieras lanzar esa carta. Esto significa que la mayoría de comandantes deberán ser lanzados como criaturas normales, durante una de tus fases principales y con la pila vacía. Pero podrás lanzar un comandante con destello (como Venser, sabio moldeador) en cualquier momento en el que pudieras lanzar un instantáneo, o usar una carta que cambie el momento en el que puedas lanzar las criaturas (como Profeta de Krufix) para permitirte hacerlo de esa forma.

Si tu comandante fuera a morir o ser puesto en el cementerio por cualquier razón, no te preocupes porque puedes elegir ponerlo de nuevo en la zona de comandante. Lo mismo ocurre cuando el comandante sea exiliado (con Espadas en guadañas o similares). Estos efectos reemplazan el destino de tu comandante, por lo que nunca llegarán a ir al cementerio o al exilio.

Una vez que tu comandante ha vuelto a la zona de comandante, podrás lanzarlo de nuevo, pero jugar a tu comandante desde la zona de comandante todo el tiempo puede convertirse en algo complicado, y es que cada vez que lo hagas después de la primera el coste de tu comandante se incrementará en {2}. Por ejemplo, digamos que mi comandante es Borborygmos furioso. Este amistoso cíclope cuesta {4}{R}{R}{G}{G} la primera vez que lo lances desde tu zona de comandante, {6}{R}{R}{G}{G} la segunda, {8}{R}{R}{G}{G} la tercera… Esto se suele llamar el impuesto de comandante.

Este impuesto de comandante se considera parte del coste total de tu comandante, así que puede ser reducido por cualquier efecto que reduzca el coste del hechizo. Supongamos que tenemos un montón de efectos que hacen que el coste de las criaturas verdes que lancemos se reduzca en {5} y que ya he lanzado una vez mi Borborygmos desde la zona de comandante. La segunda vez me costaría {6}{R}{R}{G}{G}, pero debido a la reducción de coste se me quedaría en {1}{R}{R}{G}{G}, eliminando el impuesto de comandante y parte de su coste.

Digamos que tras lanzar Borborygmos mi oponente lo devuelve a mi mano con un Anular invocación. A pesar de que mi comandante está abandonando el campo de batalla, no podré ponerlo en la zona de comandante porque solo podemos hacerlo cuando vaya a ir al cementerio o exilio. Sin embargo sí que podremos lanzarlo desde la mano, evitando de paso el impuesto de comandante ya que este solo se aplica cuando lo lanzamos desde la zona de comandante. Por tanto mi Borborygmos costará {4}{R}{R}{G}{G} pudiendo además ser reducido por otros efectos.

Como apunte final, Derevi, estratega empírea tiene una habilidad que te permite ponerlo directamente en juego desde la zona de comandante. Dado que se trata de una habilidad y no un hechizo, no está sujeto al impuesto de comandante, por lo que podrás usarla una y otra vez pagando el mismo coste.

Rules Tip escrito por Paul Baranay y traducido por Jesús Chamón