El Líder de manada de Garruk no se dispara con Nissa, despertadora del mundo

¡Nueva colección suele rimar con planeswalkers nuevos, y Magic 2015 no es una excepción a esta regla! ¡Además de un quinto Ajani, tenemos a un nuevo Garruk, así como a una nueva Nissa! La última vez que vimos a Nissa Revane fue en Zendikar, hace unos años, dónde se dedicaba a pasar el rato con sus colegas elfos y a liberar (accidentalmente) a unos monstruos devoradores que se remontan a los tiempos de la creación. Desde entonces, al parecer, ha encontrado un nuevo hobby: ¡un hobby relacionado con tierras! Su nueva carta, Nissa, despertadora del mundo hace cosas bastante divertidas con las tierras. Endereza bosques, anima tierras, y como ultimate, ¡encuentra tierras Y las anima!

Veamos ahora qué tal se lleva la nueva Nissa con uno de los viejos amigos de Garruk: el Líder de manada de Garruk. Este tío recompensa a los magos verdes dándoles cartas cada vez que juegan bichos grandes. Mola, ¿verdad? ¿Utilizar a Nissa para hacer un nuevo monstruo 4/4 cada turno y además robar una carta por la cara? Desgraciadamente, es demasiado bonito para ser cierto. El Líder de manada tan solo se dispara cuando una criatura lo suficientemente grande entra en el campo de batallo bajo tu control. La habilidad de +1 de Nissa no hace que una criatura entre en el campo de batalla – lo que hace es crecerle patas a tus tierras. Pero sigue siendo la misma tierra, YA estaba en el campo de batalla, por lo que no dispara al Líder de manada. Bueno – ¿pero qué pasa con el ultimate, os estaréis preguntando? ¡Pone tierras-criatura en el campo de batalla! Por desgracia, no ocurre de esta forma. Cuando activas su ultimate, buscas unas cuantas tierras básicas y las metes en el campo de batalla. ENTONCES, las animas. ¡Cuando entraron en el campo de batalla, todavía no eran criaturas, por lo que al Líder de manada le da igual lo grande que se han puesto ahora! Supongo que tendrás que conformarte con la aceleración y los 4/4 que te proporciona Nissa.

Rules Tip de hoy escrito por Trevor Nunez y traducido por Arthur Cohen

¿Te ha gustado este artículo? ¡Compártelo!