La mayor parte de las ocasiones es probable que utilices Fulgor celestial antes de que resuelva el daño, por ejemplo, cuando tu oponente ataca con una de sus mayores criaturas, utilizas tu Fulgor para acabar con la amenaza antes de que haga te haga daño a ti o a tus criaturas. Podrías también utilizarlo para limpiar su único bloqueador y salvar a tus criaturas antes de que se resuelva el daño. Sin embargo, al utilizar el Fulgor no puedes escoger qué es lo que se sacrifica, lo hace tu oponente. Así que, ¿para qué aburrirlo con dudas sobre que criatura alimentará tu Fulgor?… ¡Unos conocimientos sobre reglas te pueden ayudar!
Una criatura permanece “atacando” o “bloqueando” durante todo el combate. Cuando te ataco con mis criaturas, estas son consideradas “criaturas atacantes” hasta que entremos en otra fase, lo que incluye un período de tiempo desde que el daño se ha realizado. Si te ataco con una ficha Saprolin 1/1 y el Montículo de esporas que lo creó, puedes parar el Saprolin y sufrir 3 puntos de daño del Montículo. DESPUÉS del daño, puedes lanzar el Fulgor celestial, y solo tendrá una criatura que sacrificar, ¡el Montículo! Por tanto, es legal (y muchas veces inteligente) utilizar el Fulgor tras el daño, cuando ya hemos sacado de en medio las criaturas mas pequeñas para poder cazar a las grandes.
Escrito por Trevor Nunez, traducido por Nacho Pérez